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Ejecutado

Los humedales costeros de la bahía de Coquimbo, al igual que muchos otros a nivel nacional, están sujetos a una alta presión antrópica que ha puesto en jaque a estos valiosos ecosistemas. Para enfrentar las amenazas ecológicas y ambientales que se originan a partir de las presiones impuestas por la humanidad sobre estos ambientes, ONG Surgencia propuso el desarrollo de un proyecto de educación ambiental en la convocatoria 2022 del Fondo Protección Ambiental del Ministerio del Medio Ambiente, en la categoría Conservación de Humedales Urbanos.

La iniciativa se realizará en dos humedales costeros: el humedal El Culebrón, en Coquimbo, y el humedal de la Desembocadura del río Elqui, en La Serena. Ambos enfrentan graves amenazas, en especial en términos de desarrollo y presión inmobiliaria, construcción de infraestructura pública (carreteras, paseo marítimo), contaminación por acumulación de basura y escombros, tránsito de vehículos motorizados, entre otras. Tanto en el humedal de la Desembocadura del río Elqui como en el humedal El Culebrón se ha observado un aumento de movimientos de conservación liderados por diferentes actores de la sociedad civil, y desde ONG Surgencia quisieron aprovechar este ímpetu para articular e involucrar a la comunidad con un fuerte énfasis en la educación ambiental. La idea es potenciar ese empoderamiento para que el actuar ciudadano se sustente en conocimiento, incentivando así la necesidad de proteger y conservar ambos humedales.

Resultados del Proyecto

El proyecto tiene como objetivo general promover la valoración y conservación del humedal de la desembocadura del río Elqui y el humedal El Culebrón a través de la sensibilización y educación a la comunidad en temáticas que permitan identificar las problemáticas y proponer acciones para su conservación. Para ello se contempla la co-creación de rutas de aprendizaje en conjunto con voluntarios y voluntarias de todas las edades mediante educación ambiental, utilizando el aprendizaje dialógico y diseño de actividades de indagación científica.

Estas rutas representan una narrativa con la menor intervención dentro del humedal, en las cuales los propios habitantes, a partir de lo que se define de manera colectiva, cumplen el rol de relatores de la historia natural, favoreciendo el compromiso social-colectivo y una ciudadanía responsable con el medio ambiente. Dado que varias organizaciones, juntas de vecinos y agrupaciones de pescadores artesanales están trabajando en diversas acciones, como por ejemplo, instalando carteles informativos en los humedales, la idea es que este proyecto pueda también proporcionar contenido a estas iniciativas.

Se espera que los habitantes adquieran conocimientos sobre ecología, protección y conservación de los humedales costeros urbanos, lo que les permitiría actuar como agentes de cambio y ciudadanos empoderados para proponer nuevas acciones de conservación en estos ecosistemas de la bahía de Coquimbo. Para ello también será importante potenciar vínculos con la academia y diversas instituciones.

Medidas de Éxito

El resultado principal del proyecto es la co-creación de rutas de aprendizaje en ambos humedales, y buena parte del éxito de la iniciativa estará vinculado con el nivel de participación de la comunidad, esperando al menos iniciar y terminar la iniciativa con el mismo número de participantes. La expectativa es que 40 personas se involucren en el proyecto en el humedal de la desembocadura del río Elqui, y 30 más en El Culebrón. Más a largo plazo, se espera empoderar a la comunidad y en especial fortalecer las habilidades de ciertos líderes locales que a futuro podrían convertirse en agentes de cambio en el territorio.

Afiche del Proyecto

Afiche de la Convocatoria

Organización a Cargo del Proyecto

ONG Surgencia y Territorio Coquimbo.

Socios

Agrupación Conciencia Ecológica, Municipalidad de Coquimbo, Museo de la Cotidianidad-Científicos de la Basura, Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA), GEF Humedales Costeros, Asociación Gremial de Buzos Pescadores Artesanales de Caleta San Pedro, Escuela Peñuelas, Red de Observación y Conservación de las Aves Silvestres (ONG RedAves), ONG Elqui Verde, Colegio Caleta San Pedro, Asociación Gremial de Pescadores y Buzos de Peñuelas, Juntas de Vecinos: JJ.VV. Nº19 de Peñuelas, JJ.VV. Nº27 Duna Mar, JJ.VV. Población Victoria, JJ.VV. Nº10 Puertas del Mar, Vecinos Monte Aconcagua.

Financiadores

Ministerio del Medio Ambiente.

Fecha de Comienzo – Fecha de Finalización

Junio 2022 – Noviembre 2022.

Región

Región de Coquimbo.

Ubicación

Humedales El Culebrón, en la comuna de Coquimbo, y desembocadura del río Elqui, en La Serena.

Desafíos

Promover la participación activa y el involucramiento de profesores y profesoras, y vecinas/os de ambos humedales. Si bien existe un compromiso de las escuelas que son parte del proyecto, los profesores y profesoras representan un agente transformador que es vital para motivar la participación de niños y niñas.

Además, será necesario adaptarse al contexto socio-ambiental y territorial de ambos humedales, que difieren en cuanto al nivel de involucramiento de la sociedad civil, gobernanza y articulación de los diversos actores que confluyen en estos ecosistemas.

En ambos casos será un desafío pensar en estrategias de participación y deliberación de las comunidades, para que éstas se apropien del proyecto y lo puedan mantener a futuro si así lo desean. En definitiva, que reconozcan que las rutas de aprendizaje puedan serles de utilidad en educación y que sean usadas para promover las visitas responsables a los ambientes naturales.

Necesidades

Que el proyecto sea sostenible en el tiempo, aunque su continuidad tendrá que ver con las necesidades que las mismas comunidades demanden. Otra necesidad es alinearse y coordinarse con otros actores e instituciones para generar sinergias entre lo que actualmente se está ejecutando en ambos humedales.

Además, que los agentes de cambio que surjan con el desarrollo del proyecto también sean reconocidos por el GEF Humedales Costeros y otros programas e instituciones para que puedan colaborar y aportar a la preservación de los humedales costeros urbanos, promoviendo el uso responsable de los servicios ecosistémicos que nos pueden brindar.